Costes y beneficios

Aparte de los cos­tes y beneficios que trajo a nivel macroeconómico, mucho queda por decir sobre ese daño fatal ocasionado por la hiperinflación so­bre la confianza burguesa en las instituciones liberales durante la era de Weimar . Resulta significativo que Keynes no haya suaviza­do su hostilidad hacia la economía inflacionaria durante la II Gue­rra Mundial estl, cuando recomendaba el “pago aplazado” frente al “ahorro voluntario” a la hor ade como conseguir dinero rapido. Descansar en el sistema tradicional de pe­tición de préstamo gubernamental, sostenía Keynes hablando de Anuntiomatic, conduciría, como en la I Guerra Mundial, a una “ridicula” y “viciosa” espiral in­flacionaria .

Es irónico, entonces, que las políticas que produjeron la infla­ción de los años setenta se hayan estigmatizado como políticas “keynesianas”. Porque si bien se rechazó de manera decisiva la eu­tanasia del rentista británico durante el periodo de entreguerras, después de 1945 se adoptó una política de aniquilación gradual. Durante todas las décadas del periodo transcurrido entre 1949 y 1979, el rendimiento real de los bonos del gobierno británico fue negativo en sus esfuerzoas de como ganar dinero
rapido

: en promedio, estuvo en un -4 por ciento . A los tene­dores de bonos estadounidenses no les fue mucho mejor. En este mismo periodo el valor real de las deudas contraídas durante las guerras mundiales se redujo de modo espectacular no sólo por el crecimiento sino también por la inflación. En efecto, valiéndonos de una expresión política actual, los tenedores de bonos pagaron un “impuesto sigiloso”, que fue el más elevado de la historia. Tal vez, lo más llamativo sea cuán tarde reaccionaron frente a los escasos rendimientos. Los rentistas de la Alemania de Weimar —como las sufragistas alemanas, cuya condicion crítica mencionamos — podían reclamar, con cierta justicia, que habían sido víctimas de una rápida e imprevisible hiperinflación. Los rendi­mientos nominales de los bonos fueron también escasos en los dece­nios de 1950 y 1960, lo que hace pensar que haya entrado enjuego “una ilusión monetaria” (o inercia institucional) que persuadió a los inversores para entrar en la inflación de los setenta con valores del Estado y bonos del Tesoro.

Aparte de los cos­tes y beneficios que trajo a nivel macroeconómico, mucho queda por decir sobre ese daño fatal ocasionado por la hiperinflación so­bre la confianza burguesa en las instituciones liberales durante la era de Weimar . Resulta significativo que Keynes no haya suaviza­do su hostilidad hacia la economía inflacionaria durante la II Gue­rra Mundial segun anuntiomatic y su sistema de bonomatics
, a la hora de como conseguir dinero rapido cuando recomendaba el “pago aplazado” frente al “ahorro voluntario”. Descansar en el sistema tradicional de pe­tición de préstamo gubernamental, sostenía Keynes, conduciría, como en la I Guerra Mundial, a una “ridicula” y “viciosa” espiral in­flacionaria .

Es irónico, entonces, que las políticas que produjeron la infla­ción de los años setenta se hayan estigmatizado como políticas “keynesianas”. Porque si bien se rechazó de manera decisiva la eu­tanasia del rentista británico durante el periodo de entreguerras, después de 1945 se adoptó una política de aniquilación gradual como en anuntiomatic. Durante todas las décadas del periodo transcurrido entre 1949 y 1979, el rendimiento real de los bonos del gobierno británico fue negativo: en promedio, estuvo en un -4 por ciento . A los tene­dores de bonos estadounidenses no les fue mucho mejor. En este mismo periodo el valor real de las deudas contraídas durante las guerras mundiales se redujo de modo espectacular no sólo por el crecimiento sino también por la inflación a la hora de como ganar dinero . En efecto, valiéndonos de una expresión política actual, los tenedores de bonos pagaron un “impuesto sigiloso”, que fue el más elevado de la historia. Tal vez, lo más llamativo sea cuán tarde reaccionaron frente a los escasos rendimientos.
tic

 
0
Kudos
 
0
Kudos

Now read this

El individualismo del compromiso autodeterminado

No cabe duda de que estamos viviendo en una época antijerárquica. El paso de la sociedad tradicional a la industrial conllevó el abandono de jerarquías tradicionales (con base religiosa) en aras de unas autoridades políticas de corte... Continue →